Sant Andreu improvisa párkings en solares por las obras del AVE

Más de 1.550 plazas en 21 puntos intentan paliar el déficit de puntos donde aparcar
El distrito habilita parcelas públicas y privadas mientras duren los trabajos

Helena López
Barcelona

No hace falta ser conductor para percatarse de que aparcar (gratis) en Barcelona es una misión casi imposible. En su apuesta por expulsar al coche de la ciudad -y fomentar así el transporte público y el ecológico (las bicis)- en los últimos años la ciudad ha perdido cientos de plazas de párking gratuitas, que han sido sustituidas, por contenedores, por aparcamientos de bicicletas y por zonas azules o verdes. Si a esta política se le suma un distrito invadido por grandes obras, como es el caso del de Sant Andreu, con la construcción de la macroestación del AVE y del intercambiador de Rodalies Sagrera-Meridiana, el problema se acentúa hasta convertirse en uno de los principales dolores de cabeza del vecindario. Para dar respuesta a este déficit, el distrito ha creado 1.554 plazas provisionales gratuitas en 21 puntos, a la espera de que el aún lejano fin de estos trabajos permita dar respuestas definitivas.

A principios del 2009, Sant Andreu inició -tras las persistentes quejas vecinales- un plan de aparcamientos con el doble objetivo de buscar zonas en aquel momento sin uso para convertirlas en párkings, y de transformar aparcamientos en cordón en párkings en semibatería, actuaciones que buscaban soluciones transitorias a la necesidad acuciante de aparcamiento, no solo por las grandes obras.

CLAMOR POPULAR / La concejala del distrito -y de Urbanismo desde que el caso del hotel del Palau de la Música hiciera retirarse de la cartera a Ramon García-Bragado-, Gemma Mumbrú, explica que la medida, que valora como «un gran éxito», surgió a raíz del clamor popular.

«Las mejoras en el espacio público han supuesto pérdidas de aparcamiento. Se lo hemos oído decir a los vecinos en todos los consejos de barrio, nos lo han explicado las diferentes asociaciones de vecinos afectadas, y así lo ha recogido la propia encuesta de servicios municipales. Por ese motivo, a mitad de este mandato encargamos un plan de aparcamientos provisionales que diera solución a esta necesidad», reconoce la propia Mumbrú.

Dicho plan se inició en el año 2009, momento en el que ya permitió poner en servicio 622 plazas gratuitas, que en febrero de este año han llegado ya hasta las 1.554 en 21 zonas diferentes del territorio -actualmente patas arriba-, que comprenden todos y cada uno de los barrios del distrito.

Con el objetivo de liberar espacios dónde meter los, pese a todo, todavía necesarios coches, se han llevado a cabo actuaciones que han afectado principalmente a tres tipos de espacio: por un lado, solares desocupados de titularidad municipal; por otro, solares desocupados propiedad de terceros -de particulares o de Adif- y, por último, la transformación de calles en las que hasta ahora no se podía aparcar en lugares habilitados para ello.

La actuación ha sido distinta en cada uno de los tres escenarios. En los solares municipales se ha hecho una actuación de pavimentación y señalización básica, y en los solares de terceros se han realizado acuerdos con privados -Adif o otros operadores-, previa a la habilitación. En las calzadas donde antes no estaba permitido estacionar se han modificado determinadas características de la vía con una nueva señalización tanto vertical como horizontal, para indicar claramente la posibilidad de aparcar legalmente en el lugar.

El Periódico.com
Martes, 8 de marzo del 2011