El Ayuntamiento de Barcelona cederá temporalmente a entidades sin ánimo de lucro 19 solares de propiedad municipal en desuso para destinarlos a actividades cívicas de interés público, iniciativa que el consistorio ha denominado ‘Pla Buits’.
La comisión de Gobierno de este miércoles ha aprobado las bases del concurso para optar a utilizar los solares, que son dos para cada uno de los diez distritos a excepción de Ciutat Vella, que sólo contará con uno por la falta de espacios que se adecuen al plan.
Hermanitas de los Pobres
El consistorio calcula que adjudicará los solares en marzo del 2013, y desde entonces podrán usarse por un periodo de uno a tres años, ha afirmado en declaraciones a los medios el tercer teniente de alcalde y responsable de Hábitat Urbano, Antoni Vives.
Ha asegurado que no habrá retrasos de los proyectos previstos por el ‘Pla Buits’, garantizando que “no habrá retrasos asociados por la implantación de este tipo de actividad”, a la vez que darles un uso cree que servirá para dar un empuje a su destino final.
De hecho, no siempre se cederán los solares completos y, en cuanto al uso, Vives ha defendido que pueden servir para “cualquier actividad que tenga a ver con la socialización de estos espacios”, y ha citado actividades de ocio infantil, ocupacional para discapacitados, formación, ‘esplais’ o huertos urbanos. Para optar a utilizarlos deben presentarse entidades formalizadas, y se valorará la autosuficiencia de los proyectos, esto es, que la inversión para que las actividades funcionen deberán ir a cargo de quienes opten a ganar el concurso.
“Somos predicadores totales de la autosuficiencia; queremos que sean autosuficientes”, ha destacado Vives, que sólo permitirá ubicar instalaciones desmontables y, en caso de que haya más de un proyecto válido para un mismo solar, intentarán que se puedan compaginar.
Una comisión evaluará las propuestas, y entre los solares que incluye el plan figuran el número 4 de la calle Montalegre, en el Raval; la losa de los Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) en Sarrià, y el número 92 de Cristóbal de Moura, en el distrito de Sant Martí.
Uno de los ejemplos más paradigmáticos que también se incluye es el de las Hermanitas de los Pobres, en la manzana entre las calles Viladomat, Consell de Cent y Borrell del Eixample, que lleva años vacío y una plataforma vecinal –Recreant Crulles– hace meses que planea darle un uso. Tras hacerse con el solar, que era propiedad del Hospital Clínic, el Ayuntamiento anunció en 2006 la construcción de un instituto, un ‘casal’ de ancianos, una promoción de viviendas de ancianos y otras para jóvenes, pero a 2012 siguen sin edificarse.
Al colectivo no le faltan ideas, y se ha planteado crear un huerto, actividades culturales y deportivas al aire libre, e incluso ofrecer algún tipo de actividad escolar en barracones; de hecho, además de un instituto piden una escuela de primaria.
El Periódico
Miércoles, 24 de octubre del 2012
ASESORAMENT JURIDIC- ALMECIJA – ADVOCATS
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